Episodio 38
¿Cómo afecta la inteligencia artificial a los mercados laborales de América Latina?
Hernan Winkler
Episodio 37
Tendencias globales del empleo: desafíos y oportunidades para 2025
Miguel Sánchez Martínez
Episodio 36
Innovación Sostenible para el Futuro del Trabajo
Maria Sabrina de Gobbi
Episodio 35
Empleo juvenil: hay que repensar las estrategias
Susana Puerto, Katherine Velastegui
Episodio 34
Inicie y mejore su negocio: Impulsar el trabajo decente en las pequeñas y medianas empresas
Maria Tuyuc, Luisa Iachan
Episodio 33
Estrés térmico: cómo el cambio climático impacta la salud de los trabajadores
Tzvetomira Radoslavova, Gabriel Alejandro Real Ornelas
Episodio 32
En Colombia, crear empleo decente anima a los jóvenes a quedarse en el campo
Elva Molina, Paola Campuzano
Todos los episodios
¿Cómo afecta la inteligencia artificial a los mercados laborales de América Latina?
27 de enero de 2025La inteligencia artificial generativa, o IA generativa, está revolucionando nuestra forma de trabajar. Sin embargo, en regiones como América Latina y el Caribe, su auge y rápida propagación llegan a los mercados laborales con desafíos de acceso y abren interrogantes sobre el reemplazo de puestos de trabajo y los potenciales beneficios para la productividad.
En este podcast, conversamos con Hernán Winkler, quien es Economista Senior del Banco Mundial y coautor de un trabajo de investigación publicado recientemente que se centra en América Latina y analiza estas cuestiones.
Transcripción
-Hola. Les damos la bienvenida al pódcast
de la OIT sobre el futuro del trabajo.
Soy Mariana Sebastián.
Desde la automatización de tareas rutinarias
hasta la creación de soluciones innovadoras,
la inteligencia artificial generativa
o IA está revolucionando nuestra forma de trabajar,
pero ¿cómo está afectando a las distintas partes del mundo?
¿Quién tiene acceso a estas tecnologías de IA y quién no?
¿Se corre el riesgo de crear una brecha
digital cada vez mayor que podría fomentar la desigualdad?
Un trabajo de investigación publicado recientemente de forma conjunta
por la Organización Internacional del Trabajo
y el Banco Mundial ha analizado estas cuestiones, en particular,
se centra en la situación de América Latina.
Ahora me acompaña uno de los coautores
del documento, Hernán Winkler,
economista sénior del Banco Mundial.
Bienvenido, Hernán.
-Hola, Mariana. Muchas gracias por la invitación.
Antes de comenzar nuestra conversación, escuchemos
a dos personas de Buenos Aires en Argentina sobre lo que piensan
sobre las herramientas de IA generativa
y cómo las están utilizando.
Hola. Mi nombre es Rosario.
Trabajo en el sector de recursos humanos
de una empresa dedicada a la salud,
más específicamente en un sanatorio.
En nuestro caso, la verdad es que la inteligencia artificial
no tuvo un impacto,
hoy no utilizamos ninguna herramienta,
pero creo que sería una gran idea hacerlo y empezar a implementarlas,
porque en nuestro sector hay mucha gente que hace tareas
administrativas que creo que podrían automatizarse en un 100%
Esto para nada implicaría reemplazar a esta porción del personal,
sino que al contrario, yo creo que les daría
la oportunidad de poder hacer tareas
de mayor calidad y de mayor impacto para nuestro sector.
Así que de ninguna manera creo
que la inteligencia artificial pueda llegar
a reemplazar 100% a las personas,
sino que podrían aumentar la productividad del sector.
Hola. Soy Martina.
Trabajo en una empresa de software,
pero trabajo en algo más relacionado
a soften como ejecutiva de cuentas.
Yo uso cosas de inteligencia
artificial como herramientas que complementan mi laburo,
porque me ayudan a agilizar algunas cosas,
la redacción de algunos mails, siempre con mi supervisión,
mi previo borrador y mi corrección posterior
también a lo que me ayudan estas herramientas.
Creo que sí, que mejora mi productividad y que me ayuda.
Es una herramienta más de las muchas que uso hoy en día.
No creo que nos vayan a reemplazar el día de mañana.
Sí va ir cambiando un montón todas
las dinámicas como las conocemos hoy,
van a ir surgiendo nuevos puestos de trabajo,
algunos van a quedar, quizás atrás.
No creo que no haya sido algo que quizás ya ha pasado en el pasado,
pero con otra fuerza y con sus diferencias
por tratarse de una coyuntura diferente.
Creo que no hay que demonizarlo, pero tampoco mirarlo
como todo color de rosas,
es un poco el híbrido y que las leyes empiecen
a actuar más rápido para agarrar estas cosas que tan rápido surgen.
Hernán, ¿qué opinas de lo que acabás de oír
y cómo se relaciona con los resultados de tu investigación?
Creo que las dos opiniones están muy alineadas
con los resultados de nuestra investigación,
especialmente porque cuando uno ve noticias
sobre inteligencia artificial, en general,
están basadas en ejemplos específicos,
como que la inteligencia artificial reemplazará
al trabajo A o al trabajo B.
Por lo tanto, ignoran la complejidad de los mercados laborales.
Como dice Rosario, automatizar ciertas tareas permite aumentar
la productividad de algunos empleos,
lo cual es bueno tanto para el trabajador
como para la empresa,
que quizás al volverse más productiva puede generar incluso más empleo.
Martina también menciona algo muy importante
que es que aún no sabemos las nuevas ocupaciones
que surgirán gracias a la inteligencia artificial.
Por ejemplo, imaginate que estamos hace 100 años
en la década de 1920 en Buenos Aires, ¿pensás que alguien
hubiera pronosticado que en este momento
los desarrolladores de software o los especialistas
de marketing existirían en la economía de hoy?
Probablemente nadie.
Es muy interesante el debate que se abre sobre las nuevas
ocupaciones y puestos de trabajo.
Ahora, ¿por qué eligieron a América Latina como región
para llevar a cabo esta investigación?
En primer lugar, hay que considerar dos características claves
de la región que son la baja productividad
y la alta desigualdad.
América Latina es una de las regiones del mundo en desarrollo
que ha estado bastante estancada
durante más de una década y esta falta de dinamismo
se refleja en el mercado laboral.
La cantidad y calidad de empleos,
los niveles de productividad laboral son muy bajos
en comparación con otras regiones más dinámicas como Asia Oriental.
Si bien existen muchas hipótesis
que podrían explicar estos resultados insatisfactorios,
una de las sospechas habituales suele
ser el lento ritmo de adopción de nuevas tecnologías.
Luego está el problema
de que América Latina es una de las regiones
más desiguales del mundo,
según todas las mediciones de desigualdad de ingresos.
Esto significa que es una de las regiones donde la brecha
de ingresos entre los ricos y los pobres es más grande.
Cuando nos enteramos de estos estudios
experimentales que muestran
que la inteligencia artificial generativa
puede tener impactos positivos,
tanto en la productividad laboral de ciertas ocupaciones y al mismo
tiempo en reducir la desigualdad entre dichos trabajadores,
pensamos, "Guau, definitivamente es algo
que tenemos que mirar más de cerca".
Una advertencia, las cosas no son tan simples
o tan de color rosa como parecen.
Contanos, ¿qué más ha revelado
el estudio sobre la exposición de los mercados
laborales latinoamericanos a la IA generativa?
¿Quién considerás que podría utilizar
esta tecnología y en qué sectores?
Observamos que entre el 26% y el 38% de los empleos
en los países latinoamericanos están expuestos
a la inteligencia artificial generativa.
¿Qué entendemos por exposición?
Nos referimos a que algunas de las tareas que realizan
los trabajadores en estos puestos de trabajo se pueden
delegar fácilmente a esta tecnología
y debemos ser muy claros al respecto.
Esto no significa que todos los puestos
de trabajo estén expuestos al riesgo de desaparecer.
De hecho, observamos que solo entre el 2% al 5%
de los empleos corren el riesgo de automatizarse totalmente.
Por otro lado, encontramos que alrededor del 8% al 14%
de los empleos se pueden volver
más productivos gracias a esta tecnología.
Luego, hay una fracción significativa de empleos
entre el 14% y el 22% que están expuestos, pero donde aún no está
claro si el impacto será más hacia la creación
de un aumento o hacia la automatización.
En cuanto al perfil socioeconómico
de los trabajadores más expuestos a esta tecnología,
hay una asociación muy importante con sus niveles de vida.
En particular, los trabajadores más expuestos
a la inteligencia artificial tienen ingresos más altos
y están más concentrados en el sector formal de la economía.
Por otro lado, las mujeres y los jóvenes
también enfrentan un mayor nivel de exposición.
En cuanto a los sectores, que también es algo muy importante,
vemos que los trabajadores que corren el mayor riesgo de automatización
están más concentrados en el sistema bancario y financiero,
y en el sector público.
Por otro lado, los trabajadores que tienen mayores posibilidades
de beneficiarse se encuentran más concentrados en educación,
en salud y en servicios personales.
¿Hasta qué punto esta tecnología de IA está empezando
a reemplazar los puestos de trabajo de las personas?
Esa es una pregunta, claramente, muy importante y refleja
las preocupaciones de la mayoría de los trabajadores hoy en día.
¿Cuándo empezaremos a experimentar estos efectos?
Esta es una tecnología muy nueva, por lo que es muy difícil predecir
el momento en que impactará a los trabajadores.
Basándonos en nuestra investigación, podemos decir dos cosas.
En primer lugar, que el impacto puede llegar
antes a los trabajadores en ocupaciones
expuestas a la automatización,
porque ya están altamente digitalizadas.
Probablemente, la mayoría de la gente escuchando este
pódcast ha sentido que cada vez que intentamos contactar
a un proveedor de servicios públicos o a una aerolínea,
es más común hablar con un robot y no con un humano, un humano real.
Nuestros hallazgos sugieren que esta tendencia se aceleraría.
En segundo lugar, es probable que los impactos en el empleo
en el mundo en desarrollo tarden más en llegar.
Por ejemplo, en América Latina,
millones de trabajadores tienen empleos informales,
quienes no tienen acceso a tecnologías digitales y donde las
interacciones cara a cara son clave.
En esos casos, la adopción de inteligencia artificial generativa
no va a suceder de la noche a la mañana.
¿Cuáles de tus hallazgos y conclusiones
es aplicable más allá de América Latina?,
en otras regiones que están lidiando con el auge
y la rápida propagación de la IA generativa.
Un aporte importante de nuestro estudio
es que está enfocado en una región en desarrollo, América Latina,
mientras que la mayor parte de la investigación
hasta ahora ha estado muy enfocada en países ricos.
Por eso también en nuestro estudio nos enfocamos en la brecha digital,
es decir, cómo la falta de adopción de computadoras,
internet, puede ser un cuello de botella para aprovechar
los impactos positivos de la inteligencia artificial.
De hecho, encontramos que alrededor
de la mitad de los empleos que podrían beneficiarse
de esta tecnología no podrán hacerlo,
porque no usan tecnologías digitales en el trabajo.
Esto es América Latina, que es una región intermedio.
Si pensamos más, por ejemplo, en África, en países de bajos
ingresos de África, ahí hay muchísimos otros desafíos.
El sector formal es muy pequeño.
Ahí ni siquiera el acceso a tecnologías digitales
es la principal barrera.
Es muchas veces la escasez de habilidades,
la escasez de acceso eléctrico confiable.
Claramente es una condición esencial
para acceder a la inteligencia artificial.
En ese sentido, estos países de muy bajos ingresos,
las pérdidas por no poder adoptar tecnologías van a ser más grandes.
Pensemos, por ejemplo, cómo podrían beneficiarse
en mejorar el acceso a la educación, a la salud, países de África,
gracias a esta tecnología.
Esos beneficios van a ser muy difícil que se materialicen
sin solucionar estos otros cuellos
de botella que enfrentan países de bajos ingresos.
Teniendo en cuenta estas conclusiones,
¿cuáles son tus principales recomendaciones para minimizar
el impacto de la pérdida de puesto de trabajo y,
al mismo tiempo, maximizar
los beneficios productivos de esta transición hacia el uso
de cada vez más tecnología IA en el lugar de trabajo?
Claramente, los gobiernos tienen un rol muy importante acá.
En primer lugar, es importante fomentar
la mejor calidad educativa,
el desarrollo de habilidades que se puedan transferir entre trabajos,
que no sean específicas de un trabajo,
así el trabajador puede desplazarse
de un trabajo a otro cuando sufre un choque.
También es importante reforzar los sistemas de protección social.
Para los trabajadores que pierden su empleo,
asegurarse que tienen una manera de acceder
a ingresos para protegerse.
Por último está el tema de la infraestructura digital.
Es importante fomentar el desarrollo de esta infraestructura,
fomentar la competencia en el sector de telecomunicaciones
para asegurarse que, en los hogares,
los trabajadores pueden acceder a internet,
a un costo que sea algo razonable para ellos y,
al mismo tiempo, fomentar la adopción
tanto por empresas como para trabajadores,
creando los incentivos para que ambas partes adopten tecnologías digitales.
Como hemos escuchado,
parece que aún queda mucho por hacer para poder garantizar
un mejor uso de la IA generativa y el acceso a la tecnología,
incluida la creación de una transición
justa a estas nuevas formas de trabajo.
Seguro volveremos a conversar sobre este tema,
pero por ahora eso es todo.
Gracias a Hernán Winkler por compartir tus ideas con nosotros.
Gracias también a ustedes, nuestros oyentes.
Si están interesados en saber
más sobre el impacto de la IA generativa en el mundo del trabajo,
la OIT ha lanzado recientemente un observatorio
sobre IA y trabajo en la economía digital.
Su objetivo es convertirse en el principal centro
internacional de conocimientos sobre el tema.
También pueden seguir las novedades
sobre el trabajo de OIT a través
de nuestros canales en las redes sociales.
Nuestras cuentas son @OITAmericas en Facebook, LinkedIn y X.
En Instagram somos @OIT_Americas.
Una vez más, gracias por escucharnos y sumarse al pódcast.
Hasta el próximo episodio del futuro del trabajo por OIT.